PUBLICADO EN: -Arias, J.I., Torres C., Sáez D. Synovial Hemangioma in a Dog.Veterinary Surgery. 38:463–466, 2009

DESCRIPCIÓN DEL CASO

Se presentó a la consulta un canino Poodle estándar, macho de 8 años de edad y 25 Kg de peso para su evaluación ortopédica por presentar una cojera crónica de 4 meses de evolución, resistente a la terapia anti-inflamatoria, sin historial de traumas previos. El paciente presentaba una hipotrofia marcada de los músculos del muslo, sin apoyo del miembro posterior izquierdo.

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RESULTADOS

 
Al examinar el miembro afectado, éste mostró dolor a la sobreextensión de la rodilla y a la compresión de ambos lados del ligamento tibio-patelar en dirección del panículo infrapatelar. A la prueba “de cajón” fue medianamente positivo, con dolor al final del movimiento craneal-medial de la tibia. Se tomaron radiografías en vista cranio- caudal y medio lateral, encontrándose una pequeña y bien definida masa circular con opacidad de tejido blando en el aspecto próximo-caudal del panículo infrapatelar (Fig. 1 flecha). Se procedió luego a tomar un aspirado aséptico del liquido sinovial de la articulación, encontrándose un líquido de aspecto hemorrágico con un recuento eritrocitario de 30x 103 eritrocitos/µl que confirmó una hemartrosis.

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Luego de esto se procedió a someter al paciente a un examen artroscópico de la articulación (Fig. 2), encontrándose que el ligamento cruzado craneal se encontraba distendido por el desplazamiento que producía una masa pedunculada roja de apariencia villonodular  de 2 x 1 cm. Esta surgía por detrás del ligamento intermeniscal y protruía por la fosa intercondilea . Por el tamaño de la masa y su aspecto vascularizado se decidió realizar una artrotomía mediante una incisión de 10 cm en forma paralela al aspecto lateral del ligamento tibio-rotuliano. Se realizó luego una biopsia escisional, raspaje y lavado de la articulación para remover los restos de tejido y sangre de la articulación.

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La biopsia fue procesada y como resultado se encontró que era una masa circunscrita, blanda y pedicular conectada a la sinovia. histológicamente se describió como un tejido cavernoso compuesto de espacios vasculares de diferente tamaño con eritrocitos en su interior. Siendo clasificado como un hemangioma sinovial cavernoso benigno (Fig 3).

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Después de la cirugía el paciente fue derivado a terapia física para recuperar masa muscular, controlar el dolor y la inflamación. Se condujo controles periódicos cada 10 días para evaluar la evolución. El paciente mostró una rápida recuperación logrando un deambular normal. A los 40 días post cirugía se tomaron radiografías control y muestra de líquido sinovial, las que mostraron normalidad radiográfica de la articulación y ausencia de hemartrosis (Fig. 4).

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CONCLUSIONES

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Este caso canino mostró una evolución similar a la descrita en literatura para hemangiomas humanos luego de una resolución quirúrgica. Además este caso mostró que el diagnóstico artroscópico de tumores articulares es una excelente herramienta diagnóstica y para la toma de decisión entre realizar una extracción con cirugía mínimamente invasiva u ocupar la artrotomía como tratamiento.

Finalmente es importante concluir que, aunque poco frecuente, no se puede dejar fuera del diagnóstico presuntivo al hemangioma sinovial como causante de una neoplasia articular en caninos.